No conseguimos lo que nos
proponemos por falta de concentración y enfoque, y también porque no definimos con
detalle los objetivos, diseñando cuidadosamente el plan de acción que se habrá
de llevar a cabo.
Tenemos problemas para
lograr nuestras metas por el desorden, por no ser tenaces, y también porque no
hemos especificado bien lo que deseamos lograr, así que te voy a recomendar más
específicamente los pasos que puedes seguir para aterrizar tus objetivos y que
comiences a palomear pendientes y actividades que tengan que ver con tus metas,
y verás como si las alcanzas, así que estos
tips te ayudaran para convertir tus sueños en una realidad.
¿En
dónde estás ahora?
Para poder saber qué camino
tomar para llegar a un lugar, primero necesito tener como referencia en dónde
estoy ahora para hacer mi plan de cómo llegar. Define primero en dónde estás en
estos momentos de tu vida, para que te ayude a tener claro en tu mente, cuáles
son tus circunstancias y definir con ello tu situación actual.
¿Qué
es lo que quieres lograr?
Necesitas definir bien qué
es lo que quieres hacer con tu vida de ahora en adelante para poder hacer tus
planes y ponerte a trabajar en ellos.
¿Cómo
te sentirás cuando hayas alcanzado tu meta?
Está probado que visualizar
lo que deseamos nos ayuda a enfocarnos en ello, pero es aún mejor cuando además
de visualizarlo, le pones emociones. ¿Cómo te sentirás cuando hayas conseguido
lo que quieres? Involucra los sentimientos y practica esto diariamente con tus
metas, para que tu mente se mantenga enfocada en las prioridades de cada día
que te llevarán a lograrlo.
A esto le podemos añadir que
también es importante disfrutar del proceso en el que estás trabajando para
realizar tu meta. No es necesario que llegues para que seas feliz, sino ser
feliz a lo largo del camino. Disfrutar cada momento de lo que estás haciendo y
visualizando el trabajo ya terminado te dará la energía positiva para seguir
tenazmente trabajando en tu objetivo.
Fuente: organizateya.com
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