miércoles, 11 de noviembre de 2015

Ser. Conocer,Hacer

LIDERAZGO UNIFICADOR
Raymond J.Wennier


La unificación de características diferentes es no sólo escuchar las opiniones, pros y contras sobre un tema, sino entender realmente el sentido que quiere comunicar la otra persona; esa es la “Cultura de Unificar” para que se logre una solución creativa a una situación difícil. En este tema es muy difícil crear una “cultura unificadora”, cuando se habla de deportes, religión y política, tres temas que generan tanta emoción, fanatismo y reacciones automáticas impulsivas, que es casi imposible ponerse de acuerdo. Cada quien defiende su campo, su opinión, su criterio, su interés personal, sin tomar en cuenta las opiniones y argumentos de las otras personas. Se nubla la objetividad, la lógica y a veces hasta la inteligencia.

Según Joaquín M. Fuster en su libro “Cortex and Mind”, la inteligencia es la habilidad de ajustarse, por medio del raciocinio, a cambios nuevos y crear  formas nuevas de acción y expresión”. Muchas veces hay personas que aparentan ser nada o poco inteligentes dentro de un grupo porque no tienen la facilidad de pensar y razonar sobre como ajustarse al ambiente y sus influencias cambiantes, mucho menos tener el poder de buscar soluciones a problemas nuevos.

La creación de expresiones y acciones nuevas, pertenecen a personas que saben escuchar a otros y comprenden su manera inteligente única y especial y como esa inteligencia beneficia la solución de situaciones nuevas.
Enfoco entonces el resto de este artículo sobre lo que considero uno de los puntos clave en toda organización para poder UNIFICAR y eso es la COMUNICACIÓN.
Cuando hablamos de comunicación, entendemos que hay interacción entre más de una persona y hacemos referencia al trato con un grupo o equipo de personas en una empresa.
La habilidad de comunicación como requisito previo a interactuar con personas en un grupo de trabajo o social, para lograr metas, es poder hablar entendiendo a esas personas y ellas a usted. Ese fogueo cultural del lenguaje, es necesario para saber cómo piensan y como se expresan esas personas en situaciones diferentes.
El líder-azgo tiene la habilidad de expresarse con claridad cuando está explicando los propósitos de la organización a los miembros del equipo. Expresar sus ideas en términos que los miembros del equipo puedan entender aceptar y hacerlas parte de sí mismo  o ser objeto de discusión que pueda resultar en la creación de una nueva acción. Las metas a corto, mediano y largo plazo son explicadas claramente por el líder-azgo y por consiguiente los PROCEDIMIENTOS para lograr esas metas también son claros, el camino con un Norte está hecho.
Otra parte de la comunicación es saber dónde y cómo conseguir la información necesaria para su organización y poder utilizarla para el mejor beneficio. Eso es ESTUDIAR EL PASADO, conocerlo qué y por qué sucedió para evitar errores; estudiar el PRESENTE, que está pasando, quien está haciendo que, preguntarse ¿En qué negocio estamos realmente? Esa pregunta es necesario responderla antes de proyectarse al futuro.

Lo último es estudiar el FUTURO. Hay formas de visualizar con bastante certeza las tendencias que en el futuro influirán su campo de acción.
Todo lo anterior, considero, es realmente una forma de COMUNICARSE con otros cuando se puede explicar, interpretar y aplicar lo aprendido.
¡La COMUNICACIÒN UNIFICA!





miércoles, 4 de noviembre de 2015

Ser,Conocer,Hacer

El líder enseña el camino

                                              Raymond J.Wennier


“El esfuerzo propio, el deseo de lograr, el tiempo dedicado a practicar y el desarrollo de cualidades de liderazgo, no es en vano. Nuestra sociedad necesita, nuestras instituciones necesitan y sobre todo nuestra gente deseosa de seguir a un buen líder, necesita personas con esta capacidad: ENSEÑAR EL CAMINO”. Con estas líneas terminé un trabajo sobre liderazgo, publicado en 1987. Desde entonces hemos pasado épocas de todo tipo, pero específicamente la década de los años de 1990, creo, se destacó por ser egocéntrica en muchas personas que ocuparon puestos altos de liderazgo en varias organizaciones. Pensaban únicamente en ellos mismos y cómo podían beneficiarse de la organización, sin importarles lo que tenían que hacer. Con semejante actitud de azadón, afectaron las operaciones internas de su institución, las que luego afectaron los resultados finales lo que resultó eventualmente en escándalos de corrupción, ENRON como ejemplo. En la arena política a nivel internacional hubo presidentes, senadores, involucrados en problemas sexuales que demostraban el egocentrismo, además de ministros religiosos de distinta denominación con problemas de Pedofilia. Todas esas personas estuvieron en puesto de liderazgo.

No sé si por imitación o porque cree la gente que puede seguir con la corrupción, con los escándalos sexuales y añadiendo ahora el crimen organizado incrustado en organizaciones continúan actuando con el mismo fin, sólo para unos cuántos: Organización egocéntrica. Probado el fracaso colectivo, este siglo, al contrario, tiene que ser dedicado al recurso humano y a su desarrollo personal. El liderazgo entonces, con mayor razón tiene que enseñar el camino, pero con una gran diferencia a hace 30 años. El ajuste que haría, es que: El líder tendría que participar con las personas de su organización, más de cerca, en ese camino. Explico. Tomo como ejemplo lo que se dice de que las empresas deben tener responsabilidad social empresarial; si tomamos las tres primeras letras de la primera palabra, le pone significado, sustancia  a lo que hagan. En muchos casos el pensamiento de empresarios para cumplir con su “responsabilidad social”, es simplemente dar una cantidad de dinero y la conciencia queda tranquila, cumplió con su deber. Sin embargo, no satisfizo ningún tipo de situación, ni necesidad, para la sociedad. ¡Nada resolvió! Para cumplir con la responsabilidad social, hay que resolver situaciones de personas. Estamos en un país donde hay muchas personas que están en situaciones especiales, que necesitan de ayudas especiales de los empresarios. Esa ayuda sirve para ampliar la base de la productividad, no es para regalar algo. 

Sabemos que esas personas con estatus socio-económico bajo o medio no han tenido la posibilidad de ahorrar para poner su propia empresa y por esto no pueden empezar con igualdad aunque tengan la creatividad e iniciativa necesarias para empezar algo propio pero les falta la parte económica. Tienen entonces las empresas que dar mejores oportunidades de acceso económico a personas y a grupos para poder poner en práctica esa creatividad y esa iniciativa. Luego, las élites empresariales en CONJUNTO con esos grupos inician esfuerzos con las bases ampliadas para lograr exitosamente mayor productividad. Sí hay liderazgo que produce productividad, que a su vez produce el aumento en una base de personas que puedan entender y participar mejor en la política nacional. Aumenta la posibilidad y el deseo de que padres de familia quieran que sus hijos permanezcan más años en la escuela y que así logren más años de estudio.  De esta manera seguramente, más alumnos que ingresan a primer grado, saldrán de sexto y más mujeres estarán preparadas en los campos, académico, de higiene y salud que son imprescindibles en su formación como mujer, madre del desarrollo. Los tres aspectos anteriores retornan en que el recurso humano está dispuesto a seguir trabajando bien para lograr mayor productividad para AMBOS, EN CONJUNTO. Con una base más amplia en una plena productividad habrá una marcada mejoría en el ambiente de seguridad, estoy seguro. Dicen que no hay liderazgo en Guatemala. Mi teoría es al contrario. Sí hay liderazgo. Es cuestión de, en este siglo, repensar el énfasis que debe ser en la PERSONA y que hay que querer hacerlo, dar de sí, no ser egocéntrico. Dada la oportunidad, el tiempo necesario, la ayuda financiera, la dirección conjunta, el éxito sigue. Como dije en un artículo en 1994: “La participación es la clave para producir legitimidad en decisiones tomadas; si no acepta la población participar, es señal de que aún no está bien implantada una actitud de proceso democrático. Pero, aprenderá con el tiempo y con las oportunidades que se le den”.